Recurrir a menudo a peinados como colas de caballo, trenzas o moños, en los que el cabello está demasiado estirado y tirante, son hábitos que pueden desencadenar en un problema capilar. Un ejemplo puede ser lo que se denomina alopecia por tracción, es decir, la pérdida del pelo como consecuencia de la excesiva y continuada tensión que sufre el folículo. Suele darse en mujeres, niños y hombres, aunque éstos últimos en una menor medida. Normalmente, es una calvicie temporal, que afecta sólo a un área concreta pero, si no se frena a tiempo, puede convertirse en una alopecia permanente.
¿Qué es la alopecia por tracción?
La causa principal es la torsión del cabello o roce de objetos contra éste, como el uso de peinados que lo tensan más de lo debido. Esa tirantez soportada por el cuero cabelludo provoca que, poco a poco, el pelo se desligue del folículo y éste se cierre por completo, no volviendo a nacer en él ningún cabello. El uso de gorros, cascos o pañuelos puede ser también un motivo que dé lugar a este tipo de calvicie, ya que presionan el cuero cabelludo ocasionando problemas inflamatorios en la raíz. Aunque son casos muy excepcionales, puesto que se trata de complementos que están fabricados teniendo en cuenta la fisionomía del ser humano. Igualmente puede darse por el uso de extensiones, que lo que hacen es añadir peso y oscilación y, por tanto, los tejidos de la cabeza sufren.
Tricotilomanía y ‘dolor de pelo’
Otra causa de alopecia por tracción puede ser la tricotilomanía, un trastorno que puede aparecer con la depresión o la ansiedad, y que consiste en estirar y arrancarse de forma compulsiva el cabello, provocándose calvas delimitadas. Los dolores de cabeza o ‘dolor de pelo‘ al finalizar el día, sobre todo si se ha llevado una coleta o un recogido estirado, podrían ser síntomas de este problema. Así, hay que mantenerse alerta por si estas señales se repiten. Se trata de una sensación que ocurre cuando las terminaciones nerviosas de cada folículo sufren presión estar en la misma posición durante horas . La falta de densidad es otro signo a tener en cuenta, junto con la caída del mismo, hormigueo o comezón.
El peinado es responsable de la alopecia por tracción
¿Existe tratamiento para la alopecia por tracción?
Detectar la alopecia por tracción de forma anticipada es el mejor tratamiento. Cuidados como evitar los tintes, los productos químicos abrasivos o la exposición a fuentes de calor y, sobre todo, no hacerse recogidos demasiado estirados son básicos para frenar la caída del cabello. En el caso de persistir la situación, el equipo médico del Doctor Antonio Burgos podrá estudiar cada caso para aplicar la mejor solución personalizada a cada paciente, como por ejemplo un tratamiento capilar a base de un medicamento vasodilatador que fortalece los cabellos miniaturizados y que se emplea tanto en las perdidas de pelo femeninas como alopecias masculinas, o el injerto capilar con la técnica FUE (Follicular Unit Extraction), tras haber realizado un correcto diganóstico del paciente.