La alopecia difusa es un tipo de pérdida de pelo en el que todo el cuero cabelludo se ve afectado aunque no muestra ningún signo de irritación, descamación o inflamación. Puede afectar a hombres y mujeres por igual y, aunque no está considerada como una enfermedad grave, puede requerir un tratamiento médico capilar para el fortalecimiento de los cabellos.
¿Qué es la alopecia difusa?
La alopecia difusa supone la pérdida progresiva del pelo de la cabeza como consecuencia de un trastorno o una enfermedad, siendo la caída capilar uno de los síntomas de ésta. Este tipo de calvicie comienza con la disminución de la densidad capilar del paciente, que puede observar -con el paso del tiempo- cómo el pelo se va volviéndose más lacio y seco sin razón aparente.
Notar que el pelo se cae no tiene por qué ser una señal de alarma de que se padece alopecia. Según los expertos, un paciente sólo puede ser diagnosticado de alopecia cuando pierda más de cien cabellos diarios. Y es que, la caída y crecimiento del pelo es un proceso natural de renovación del mismo que se conoce como ciclo de vida del cabello. No obstante, si la caída del cabello es acusada y se aprecian señales de poder padecer esta patología, lo mejor es acudir a un tricólogo para que valore la situación y aplique el mejor tratamiento médico capilar disponible.
Alopecia difusa en mujeres ¿tiene solución?
La caída difusa de cabello en la mujer suele estar motivada por dos causas: una alopecia androgenética femenina o un efluvio telogéno (aunque pueden solaparse ambos motivos). La caída del cabello tiene consecuencias más allá del aspecto estético según un estudio del Instituto de Tricología de Reino Unido en el que el 95% de las mujeres -y más del 81% de los hombres- admiten que la salud capilar afecta en su estado anímico; es por ello que la alopecia difusa femenina puede generar casos de ansiedad, reducir la autoestima e, incluso, afectar al entorno sociolaboral.
Efluvio telógeno en mujeres
Las mujeres que padecen efluvio telógeno experimentan una caída del cabello por una alteración en el ciclo de crecimiento del cabello. En estos casos, los folículos pilosos en crecimiento aceleran su evolución pasando de forma sincronizada y prematura a la fase de reposo, por lo que la mujer cuenta -en un momento determinado- con más cabellos en fase telógena (próximos a caerse) que en estado normal; hecho que hará que pierda más pelo del que debería en los meses siguientes.
Según la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), esta patología puede estar motivada por diferentes factores. Entre las causas más comunes se encuentran:
- Las deficiencias nutricionales de vitaminas, sales minerales y proteínas, fundamentalmente.
- Los trastornos carenciales como la anemia por disminución de hierro en el organismo (anemia ferropénica o sideropénica).
- Las alteraciones del sistema endocrino, bien por cambios fisiológicos como el embarazo (efluvio telógeno postparto) o patológicos como las enfermedades tiroideas.
- Determinadas situaciones de estrés psíquico, como una muerte, un divorcio o una mudanza.
- Un sufrimiento físico importante como una cirugía, una enfermedad grave o un traumatismo.
- Determinados fármacos como el enalapril, la levodopa, la carbamacepina, el litio, algunos beta-bloqueantes, el interferón o la ciclosporina.
Estos factores son los principales responsables de la caída prematura del cabello, que suele presentarse entre dos y cuatro meses después de que el factor desencadenante haya empezado a hacer efecto sobre el organismo. Independientemente de la intensidad que pueda alcanzar la caída capilar, el efluvio telógeno no provoca daños irreversibles sobre el folículo piloso, que puede recuperarse al año de haber eliminado el factor desencadenante de la pérdida. Un signo positivo que indica la repoblación capilar es observar pelos cortos y finos en el borde Alopecia difusa.del cuero cabelludo.
Alopecia androgenética femenina
La alopecia androgenética femenina se caracteriza por la disminución de la densidad capilar en la zona central de la cabeza de la mujer como consecuencia de la pérdida de pigmentación y de que los cabellos van volviéndose más finos y cortos. Este tipo de calvicie (patrón femenino de la alopecia androgenética) puede desarrollarse en cualquier etapa de la vida y afectar a la mitad de las mujeres de 50 años. Asimismo, en su desarrollo -en una edad próxima a la menopausia- intervienen los estrógenos, la prolactina y otras hormonas, además de los andrógenos, característicos del patrón masculino. Los grados de la alopecia androgenética en mujeres se pueden medir con según la escala Ludwig.
¿Cómo diferenciar el efluvio telógeno de la alopecia androgenética?
Aunque tanto el efluvio telógeno como la alopecia androgenética suponen la pérdida difusa de cabello, ambos fenómenos pueden diferenciarse por el tiempo en el que el paciente tarda en percibir la disminución de la densidad capilar. La alopecia androgenética está motivada por factores genéticos, por conlleva la pérdida gradual y lenta del cabello; por contra, el efluvio telógeno es un proceso mucho más repentino en el que el pelo pasa muy rápido de la fase de crecimiento a la de caída, por lo que la pérdida de densidad capilar puede ser apreciada por el paciente en un corto espacio de tiempo.
Alopecia difusa masculina
En los hombres, la tasa de incidencia de la alopecia difusa es similar a la femenina, pues los factores que la motivan no varían en función del sexo. En ocasiones, su confusión con otro tipo de calvicies -como la androgenética- puede llegar a inducir que la pérdida difusa de cabello es superior en los hombres, pero es un error.
¿Cómo saber si se tiene alopecia difusa? Causas
Por lo general, la alopecia difusa no suele tener una única causa, si no que puede estar motivada por diferentes factores como: el estrés, una alimentación deficiente, la toma de medicamentos, haberse sometido a un proceso de radioterapia o a intervenciones quirúrgicas con anestesia general.
Alopecia difusa por enfermedad
Las enfermedades o los trastornos temporales son la principal causa de las alopecias difusas. Entre las enfermedades más comunes destacan: enfermedades venéreas (sífilis), cancerosas (linfomas), autoinmunitarias (lupus eritematoso sistémico) e intestinales inflamatorias crónicas (colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn). Igualmente, la alopecia difusa puede estar motivada por: infecciones, diabetes mellitus, trastornos alimenticios (bulimia y anorexia nerviosa) o alteraciones de la glándula tiroides (hipertiroidismo e hipotiroidismo)
Alopecia difusa por medicamentos
La alopecia difusa puede estar motivada por la toma de determinados medicamentos que afecten, de manera negativa, al cabello. Los fármacos que pueden causar este tipo de caída del cabello son: inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina, betabloqueantes, reductores de lípidos/grasas, retinoides (derivados de la vitamina A), medicamentos tiroideos, heparina (anticoagulantes), antibióticos y analgésicos.
Alopecia difusa por alimentación
La alimentación juega un papel fundamental en el correcto desarrollo y funcionamiento del cuerpo. Una alimentación desequilibrada o poco saludable, la realización de dietas radicales, la supresión de algunos alimentos que comporten déficits (como, por ejemplo, de proteínas o hierro) para el organismo tendrán una repercusión.
Relación entre el estrés y la alopecia
El estrés es un estado de cansancio mental que puede provocar trastornos físicos y mentales. Este tipo de situaciones de exigencia de alto rendimiento pueden afectar a los folículos pilosos y, por ende, motivar la caída excesiva del cabello. En estos casos, el estés conlleva la liberación de neurotransmisores y otros químicos que pueden dañar las unidades foliculares, desencadenando el desarrollo de un proceso de caída uniforme y homogénea del cabello alrededor de toda la cabeza.
Diagnóstico de la alopecia difusa: síntomas y signos
El tricólogo es el médico especialista para la realización del un diagnóstico de la alopecia difusa. Al estar motivada por algún factor desencadenante, el médico deberá realizar una serie de preguntas que le ayuden a identificar la razón que está causando la pérdida de cabello y la disminución de la densidad capilar. Durante esta entrevista, el médico podrá preguntar por enfermedades, infecciones, medicamentos, o rutinas alimentarias que pudieran estar afectando al desarrollo de los folículos del paciente.
La alopecia difusa… ¿es temporal o permanente?
Al contrario que ocurre con otro tipo de procesos de caída del cabello, como las alopecias areata o androgenética, la alopecia difusa sí que puede ser reversible si se elimina la enfermedad o trastorno responsable del empeoramiento del estado del pelo. En la mayor parte de los casos, padecer una alopecia de tipo difuso está considerado como una enfermedad temporal.
Tratamiento de la alopecia difusa
Tras el diagnóstico del factor desencadenante que está causando la alopecia difusa por parte de un médico especialista, lo propio es eliminarlo para que el pelo deje de verse afectado y comience a recuperarse alrededor de seis meses o un año. Este tipo de pérdida capilar no tiene por qué obligar a un tratamiento, aunque está recomendado el tratamiento médico capilar con fármacos, un fármaco vasodilatador de uso tópico que fortalece los cabellos miniaturizados y estimula la papila dérmica.
Estos fármacos se emplean tanto para el tratamiento de las alopecias masculinas como en las pérdidas de pelo femeninas. La efectividad del tratamiento capilar de la alopecia con medicina capilar aumenta cuanta mayor sea la concentración (en torno el 2% y el 5%) y su aplicación debe mantenerse durante al menos seis meses.